La Deglución Atípica consiste en la postura y uso inadecuados de la lengua en el acto de deglución. Se define como «la presión anterior o lateral de la lengua contra las arcadas dentarias».
(Zambrana y Dalva, 1998). La lengua se posiciona entre los incisivos o se apoya contra su cara posterior al acabar la fase de masticación y realiza una presión contra ellos durante la fase de deglución.
Algunas atipias con respecto a la deglución normal son:
– Interposión lingual.
– Contracción excesiva de los labios.
– Escape de alimentos.
– Falta de contracción de los maseteros.
– Contracción del mentón.
-Movimientos del cuello.
-Ruidos al tragar.
-Mantener residuos en la boca después de tragar.

Si observamos la deglución al beber agua en un vaso transparente podremos darnos cuenta que las personas con deglución atípica alargan la lengua para contactar con el vaso; tienden a bajar la cabeza para beber e inclinarlas hacia detrás para tragar; pueden tener excesiva actividad en los labios cuando están bebiendo y/o en ocasiones podemos observar el movimiento de la lengua hacia detrás cuando acaba la bebida.
Si observamos la ingesta con cualquier tipo de alimentos podemos observar: si protuyen la lengua para alcanzar los alimentos, si colocan el ápice lingual entre los incisivos superiores e inferiores; si abren frecuentemente los labios durante la masticación; si empujan el ápice lingual contra los incisivos superiores o lo colocan entre los superiores e inferiores; si pueden necesitar más de una deglución por bocado; si en el momento de la deglución o un instante antes mantienen los labios apretados con excesiva fuerza; si después de tragar parecen recoger y limpiar la boca y entonces vuelven a tragar; si no contraen los maseteros en el instante de la deglución; si en su cavidad oral o en la lengua se aprecian residuos después de tragar…